8-11 personas
4 habitaciones
3 camas dobles
2 camas individuales
3 baños
Invitamos a que conozcan esta antigua casa de labranza, construida en el año 1901, a base del esfuerzo y el afán de nuestros antepasados.
Hace unos pocos años la hemos rehabilitado con mucho cariño para el disfrute de nuestros clientes, pero a su vez, manteniendo la esencia y el encanto tradicional de la misma
Interior:
Tres dormitorios con cama de matrimonio, un dormitorio con dos camas dobles individuales y tres baños completos. También se ofrece la posibilidad de disponer de dos camas supletorias.
Amplio salón con una acogedora y típica lareira gallega.
Exterior:
Amplia cocina con comedor, que dispone de todas las comodidades; nevera, microondas, horno, lavavajillas, menaje, lavadora.
Dispone de cenador.
Para los más pequeños de la familia.
Estupendo jardín de 2000m² totalmente amurallado, propiciando un ambiente íntimo y apacible, así como una óptima seguridad para que los más pequeños jueguen de forma libre.
Con capacidad para varios vehículos.
Actividades y eventos:
Senderismo, Golf, Quads, Coto de pesca, Paintball…
Para disfrutar de un fin de semana de celebración de aniversario, comidas familiares o de amigos, así como otros pequeños eventos, contáctenos y le informamos.
Tarifas
Temporada baja
€200noche
Temporada alta
€250noche
¡Contáctenos!
Teléfono: +34 606181281
E-mail: info@casadeagosto.es
Casa De Agosto, está situada a orillas de A Costa da Morte, en un pequeño pueblo del ayuntamiento de Coristanco, llamado Pousada.
Un lugar idílico, para un apacible y merecido descanso, rodeado de fantásticas playas y diversos parajes naturales; como el Refuxio de Verdes, incluido en la Red Natura, el cual nos adentra en el impresionante paisaje de un bosque autóctono; un lugar para dejarse llevar por la paz y la tranquilidad que transmite el rugir de las aguas del río Anllóns.
Un lugar idílico, para un apacible y merecido descanso, rodeado de fantásticas playas y diversos parajes naturales; como el Refuxio de Verdes, incluido en la Red Natura, el cual nos adentra en el impresionante paisaje de un bosque autóctono; un lugar para dejarse llevar por la paz y la tranquilidad que transmite el rugir de las aguas del río Anllóns.